En el espacio intramuros que encierran las murallas del casco antiguo, la ciudad nos sorprende con el trazado en cuadrícula de sus calles empedradas y jalonadas por bellos edificios con balcones de hierro forjado y amplios y labrados aleros de gran belleza arquitectónica.
Es la calle principal de la Ciudad y la que cuenta con las edificaciones más singulares. Sobresalen los aleros de sus casas, unos dobles y otros sencillos, con los canecillos tallados, balcones de hierro forjado y escudos.
Obsérvense las casas no 26, 24 y 22. Casa Consistorial, no 20, de estillo barroco (1735); la Casa de Casadevante, no 5, donde se negociaron los términos de la tregua del Sitio de 1638; la Casa Zuloaga, no 8, solar del conde de Torre-Alta, donde se ubican el Archivo Histórico y la Biblioteca Municipal; Casa Iriarte (entrada por la calle Tiendas no 2) llamativa por el entramado de sus fachadas, los modillones en madera y sus vigas. La Casa Ladrón de Guevara, nº2, cuya fachada es de ladrillo azul vitrificado, única en su estilo.
En ella se encuentra la casa solariega de los Eguiluz donde, según la tradición, se alojaron Doña Juana la Loca, hija de los Reyes Católicos y Don Felipe el Hermoso cuando se dirigían de Bruselas a Toleda para ser proclamados príncipes herederos y se detuvieron tres días en Hondarribia (año 1502).
Servía a la guarnición para el ejercicio de la armas y la Ciudad para proclamaciones, recepciones, corridas de toros y otros festejos populares. En el edificio ARMA PLAZA se informa sobre lo que ofrece la ciudad.
Por el paso existente frente a la casa Eguiluz llegaremos a la Plaza de Gipuzkoa. Aunque de reciente construcción, su encanto hace de este lugar un marco ideal para la celebración de conciertos y espectáculos.
Se trata de una de las calles más antiguas de Hondarribia. De hecho, se conoce con el nombre actual desde el S.XVI. En uno de sus extremos sobresale la Casa Torre Urbana de Palencia, llamada también Echevestenea. En esta casa nació Don Cristóbal de Rojas y Sandoval, quien llegó a ser Arzobispo de Sevilla, capellán de Carlos V y protector de Santa Teresa La ciudad de Hondarribia erigió una estatua a su ilustre hijo frente a su casa natal, en la plaza que lleva su nombre.
Calle con interesantes casas, plantas bajas de piedra sillas con los huecos adintelados. Los pisos superiores avanzan sobre los muros. Destaca la Casa Rameri, no 16, sede de la Asociación de Amigos de la Historia de Hondarribia y futuro museo de la Ciudad.